Tres formas para mantener tu sistema inmunológico bajo control

Asegúrese de que tu cuerpo y sistema inmunológico estén fortalecidos contra posibles ataques. Como cualquier otro sistema del cuerpo, tu sistema inmunológico depende del equilibrio y la armonía para funcionar correctamente. El estrés, la dieta y el ejercicio, además de otros factores como la edad y el sueño, pueden afectar significativamente tu estatus inmunológico a largo plazo. Por lo tanto, es importante controlar los factores clave a medida que se presentan en tu vida diaria, no solo cuando llega el momento de tu vacuna anual contra la gripe. A continuación te presentamos tres formas principales de mantener tu sistema inmunológico funcionando de manera óptima a largo plazo.
Manejar y minimizar el estrés
Cuando tengas un trabajo intenso, intenta tomar un respiro y darte un descanso. El estrés desencadena naturalmente respuestas de lucha en todo el cuerpo, lo que resulta en un aumento de la frecuencia cardíaca y respiratoria, tensión muscular y flujo de oxígeno a tu cerebro, que puede ser bueno en pequeñas dosis, pero cuando experimentas estrés crónico, tu cuerpo nunca recibe la señal para volver a la normalidad después de que la amenaza percibida haya disminuido. Esto puede plantear problemas de salud graves con el tiempo, como presión arterial alta, enfermedades cardíacas, diabetes, así como ansiedad y depresión.
El estrés es abrumador, así que comienza con algo pequeño. Prueba el yoga, la meditación o haz una caminata. Un masaje relajante o incluso un momento de silencio a solas pueden reducir tu frecuencia cardíaca y ayudarte a pensar con más claridad.
Prioriza tu sueño
La pérdida crónica de sueño presenta respuestas corporales similares a las provocadas por el estrés. Entonces, aunque puede ser tentador decir que sí a todos los compromisos sociales o intentar conquistar todo en un día, no siempre es lo mejor para tu cuerpo. En momentos de mucho estrés, las personas a menudo se desvían de sus horarios habituales de sueño o pierden el sueño por completo, lo que a la larga deteriora las funciones inmunitarias y de otros sistemas. Puedes lograr mucho en 24 horas, pero si el sueño no está en tu lista, perderás el tiempo necesario para que su cuerpo se recupere. Recuerda, las enfermedades atacan cuando las defensas son débiles, ¡así que descansa! Si tienes dificultades para conciliar el sueño, la meditación puede ayudar, así como llevar un diario antes de acostarse para despejar la cabeza.
Cambia tu dieta
Las temporadas de transición a menudo traen todo tipo de cambios, ya sea el clima, tu rutina de ejercicios o incluso tu lista personal de compras. Mientras tu cuerpo se tambalea por las inconsistencias en el clima, mantén tus sistemas estables con una dieta fresca y saludable. Si con frecuencia comes comidas rápidas fritas o usas aceite para saltear sus verduras en casa, esto puede ser en parte el culpable de sus tardes hinchadas y mañanas lentas. Intenta hacer el cambio cocinando un caldo rico en nutrientes, cuyas vitaminas y minerales pueden mejorar seriamente el funcionamiento de tu sistema.
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Hay varias formas de controlar a los agresores clave que pueden debilitar tu salud inmunológica, desde controlar el estrés y la cantidad de sueño hasta tomar diferentes decisiones en la tienda de comestibles o incluso complementar tu dieta, con la extensa línea de suplementos premium de Mend + Defend que aumentan la inmunidad . Con productos como las cápsulas, el polvo First Colostrum y Zinc PerforMins altamente biodisponible, tomar decisiones conscientes de salud para mantener tu sistema bajo control es simple.





